¿Queremos el turismo de masificación?

¿Queremos el turismo de masificación?

¿Queremos el turismo de masificación? 150 150 Isabel

A todos nos suena el caso de overtourism de Venecia con con 54.000 habitantes y 30 millones de turistas yendo y viniendo, o el de Islandia o más cercano el del Salto de Bierge con esos cientos de turistas agolpados en sus muros. ¿Realmente es ese el turismo que queremos seguir conservando?

La pandemia CODVID 19 nos ha dado tiempo para reflexionar acerca de la actividad turística y su necesidad de enfrentarla desde un ámbito distinto. Necesitamos trazar nuevas líneas y pensar qué tipo de turista es el que queremos atraer. El turismo de masas genera problemas añadidos: gentrificación, problemas inmobiliarios y en general, bajada de precios lo que conlleva unos sueldos bajos en algunas profesiones turísticas como las Kellys.

¿Es el turismo de masas el futuro del turismo?


Definitivamente creemos que no. Y no somos los únicos. Cada vez más voces críticas se plantean el gasto de recursos naturales que una sobrepoblación como la de Venecia tiene sobre su propio ecosistema.

Durante la pandemia una de las noticias que abrió los telediarios de todo el mundo nos mostraba a la ciudad del Lido con sus aguas transparentes, peces y canales desiertos. ¿Podemos mantener este ritmo de consumo rápido de destino? ¿Es beneficioso para la industria turística? Islandia prepara un plan para que sus turistas estén más tiempo, y se repartan por todo el país para detener el deterioro de su ecosistema en determinados puntos. En Seychelles llevan a cabo una gran reforestación para cuidar su ecosistema.

¿Qué futuro hay en España?

España es el segundo destino turístico del mundo. El turismo no es una industria anecdótica dentro de nuestro país por lo que necesitará en los próximos años de líderes que planifiquen su futuro, que apuesten por la conservación de los recursos, por aumentar el interés del viajero para permanecer más tiempo en nuestro país, y para descubrir otras ciudades, un modo de vida y una cultura. Por esa razón es necesario estar preparados. El turismo debe ser profesional y crear puestos de trabajo estables, con una remuneración suficiente y de calidad. En la Escuela Universitaria de Turismo de Zaragoza lo tenemos claro y apostamos por preparar a nuestros alumnos ante los retos del mañana porque sabemos que volveremos a viajar, pero también que debemos ser más conscientes de la huella que generan nuestros viajes.
El futuro pasa por plantear regulaciones adicionales, apostar por los consumos locales y por mantener el espíritu de nuestros destinos a la vez que complementamos el viaje con nuevas experiencias que hagan que nuestra estancia sea mayor.